Resumen del Super Clasico Cerro (1) - Olimpia (3) [VIDEO]
Un certero Olimpia se quedó este domingo con la edición 288 del clásico paraguayo y bajó de la punta del Clausura a su clásico rival en una noche de terror para el portero azulgrana Cristian Álvarez, responsable en el primer gol de Claudio Vargas y en el tercero de Alejandro Silva. Pablo Zeballos marcó la segunda conquista del Decano. Jonathan Santana había gritado el empate transitorio.
MAS NOTICIAS:EN LA PUNTA HAY UN REY (OLIMPIA)
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Olimpia fue contundente ante Cerro Porteño y lo derrotó de manera justa por 3-1 en otra edición del superclásico del fútbol paraguayo ante más de 30.000 personas en el Defensores del Chaco. El equipo de Francisco Arce aprovechó el error de Cristian Álvarez, que atajó muy adelantado y golpeó temprano mediante Claudio Vargas.
La reacción del conjunto azulgrana no se hizo esperar y lo emparejó mediante un cabezazo de Jonathan Santana. Después el Decano volvió a asestar otro golpe mayúsculo con Pablo Zeballos antes de terminar el primer tiempo. En la complementaria, con un tiro libre de Silva, terminó con las esperanzas del empate y la retención de la punta.
Con este resultado, el Franjeado se queda con el orgullo y el prestigio, también con el liderato del campeonato Clausura. Los tres puntos alzan a la franja azabache al trono de la competencia con 37 unidades y refuerza su ilusión de conquistar su título número 40. El Ciclón queda con 35 puntos.
EL PARTIDO. Claudio Vargas destrabó el inicio de la puja, excesivamente calculador hasta ese tiempo y con una pegada mágica abrió los portones a un clásico de muestra de poder mutuo. El franjeado aprovechó el adelantamiento de Cristian Álvarez e hizo explotar de algarabía la mitad de un colmado Defensores del Chaco (min 11).
El Ciclón sintió la herida en el cuerpo y respondió de inmediato, dos minutos después, cuando Rodrigo Rojas hizó una gran jugada individual por el sector derecho, sirvió el centro en el corazón del área por donde apareció Jonathan Santana para dar el enfrentazo y emparejar el choque y hacer delirar a los hinchas azulgranas.
Antes de estas dos conquistas, Miguel Paniagua ya estuvo a punto de echar el cero, pero su disparo devolvió el travesaño (m.6) que había desenfundado al encontrar un despeje corto de Diego Lugano. El equipo de Roberto Torres entró más quieto y sufrió los primeros sacudones de un Olimpia que impulsado por Zeballos en las faneas de ataque.
No obstante, los goles sucesivos descomprimieron la atmósfera comprimida en la que el Azulgrana se amigó del balón y estuvo muy cerca de infringir el segundo golpe con un disparo violento de Santana (20 m). A esta altura, el enfrentamiento ganó en vivacidad y cada acercamiento parecía la chispa que podría desatar otro festejo.
Y cuando el Ciclón llevaba la voz cantante en el encuentro, Candia inventó una gran jugada por el secor izquierdo, rompió líneas y el resto lo escribió todo Pablo Zeballos. El delantero se internó en el área, gatilló en el cuerpo de Bruno Valdez se cruzaba en la trayectoria, pero la fortuna le hizo un güiño para dejarle a su merced el rebote y ahí ajustició con un remate colocado a Álvarez (28 m.).
La ventaja del mayor enemigo deportivo, era un volver a comenzar para Cerro. Y lo hizo, aunque sin demasiadas luces en los metros finales. El equipo del Tiburón mostró el juego de dominio, pero requirió de mayor desequilibrio.
Un nuevo remata de Santana, que sacó bien Diego Barreto, y un cabezazo de Bruno Valdez, que no terminó lejos, más otras aproximaciones, no fueron suficientes para echar la trinchera de Olimpia, que retrasó sus lineas y esperó agazapado en el contragolpe, una situación que no ocurrió en el resto del primer acto.
En la complementaria, el elenco de Barrio Obrero siguió adueñándose del espíritu del partido y en contrapartida Olimpia acrecentó la postura cautelar cuando añadió más músculo al mediocampo con Robert Piris Da Motta en detrimento de Claudio Vargas (55 m).
A esta altura, Barreto había negado el empate a Jonathan Fabbro, que decidió colocar, pero la volada del portero evitó otro grito en Sajonia (49 m). Más allá de los pivoteos de José Ortigoza, las ganas de Sergio Díaz, no provocaron mayor estupor hacia la zona defensiva del Decano.
La necesidad obligó a Roberto Torres a sacar a Jonathan Santana cuando la pelota ya no era posición exclusiva del equipo y apostar por los goles de Guillermo Beltrán (66m). Y en uno de balones largos a José Ariel Núñez, que había suplantado a Zeballos, provocó la falta de Bruno Valdez para que Alejandro Silva concrete el gol en una noche de terror de Álvarez, otra responsable de la caída de su valla.
En los minutos finales, Cerro se fue hacia adelante impulsado por el corazón que por el fútbol. Creo un par se situaciones, pero no tuvo acierto como casi en toda la noche,pese de nutrir su ataque con Enrique Borja y potenciar su extremo con Matías Rojas. El conjunto de Arce, ya sin Piris Da Motta, se arrinconó atrás y terminó ganando sin apuros un partido con olor a campeonato.